jueves, 28 de mayo de 2009

Talones de la cabeza

Hoy es jueves. La cosa es que hace frío y, contrariamente a lo que le pasa a un motor de auto, mi cabecita no se enfría sino que le agarra esa costumbre rara de ponerse a pensar. Ojo, que pensar no es lo mismo que sacar conclusiones brillantes de la vida. Es sólo pensar.

Y pensando un poco en esta mañana fría, llegué a dos conclusiones.

Una de ellas es que, en algún punto de la vida, hay que resignarse a ciertas cosas. Por ejemplo:

- Que no importa que a TODOS les guste ESO. Si a vos ESO no te gusta, aunque a todos sí les guste, no te va a gustar ni ahora ni nunca.
- Que no va a aparecer ESA persona con las cinco cosas que vos querés que tenga, para hacer CHECK, CHECK, CHECK..!
- Que no importa cuántas madrugadas resacosas te digas "NO TOMO MÁS"... a la próxima invitación ahi vas a estar, firme cual rulo de estatua.
- Que lo que planeás que te lleve DOS horas te va a llevar SEIS... (¿o no, Borello?)
- Y que hay cosas que, simplemente, NO HAY FORMA!. Y acá es cuando me aflijo un poco. Un poco nomás, porque ya lo resigné bastante.

De éste último punto deriva la segunda conclusión. Hay ciertas cosas que no me quedan. No me quedan, no encuentran lugar en la repisa, no encajan en la cerradura, no terminan de ayudar a mis neuronas con la sinapsis. Cosas frente a las cuales me siento una niña de tres años, a la que le tienen que explicar con grafiquitos o representarle todo con títeres de trapo.

Acá va la lista tentativa; debe haber muchas cosas más que, cuando las recuerde, serán posteadas. La razón, luego:

- Cómo jugar al truco. Pobres amigos míos... resígnensé de una vez!! No voy a aprender a jugarlo, ni en la tranquilidad de una tarde de sábado entre mates, ni haciendo la cola para el recital de Maná, Chateau 2000; NUNCA jamás escucharán decir de mi boca "¡Hay equipo!" cuando, desesperados ante la falta del cuarto jugador, lancen la pregunta al aire...

- Cómo preparar un mate correctamente. Oh, padre mío. Tenaz y firme como el rulo antes mencionado. También tú, resígnate. Tu ancestral secreto de cómo preparar el mate con peperina y yerba de naranja, sin taparse, en la medida justa, combinando porcentajes exactos de cada ingrediente, morirán contigo. Yo sé que quieres seguir creyendo. Si tu hija pudo memorizarse los colores en inglés a los dos años, podrá con tan cotidiana tarea. Pero créeme cuando te digo, oh progenitor amado, que nop.

- Cómo limpiar la pileta con todos los fifibudios de filtros y agregados de cloro y sacar los bichos del coladorcito, y todo eso. A mí no me joroba, al fin y al cabo vos, vos y vos también saben que me la banco muy bien sin pileta, aún con 40° a la sombra... Tal vez acá el problema no sea tanto que no me entre, sino que no me interesa.

- Cómo funcionan las palancas de cambio en un auto o cualquier cosa de cuatro (o más) ruedas. Juli querida, sé de tu esperanza; que cuando llegue el improbable día que nos encontremos ante un peligro inminente y con un tractor en mano*, yo te diga "No te preocupes, nena... yo me conozco todas las marchas"... Yo que vos le pongo fichas a la Yoha, que pudo sola con Plaza España.

- El Sistema Financiero. Todo bien con el LOTUS, Siscard, Plataforma Comercial, Sistema de Gestión (malditas contraseñas)... Pero con Sistema Financiero todo MAL! Podrán seguir insistiendo, compañeros de Multiconex Contact Center, de que Sistema Financiero era MIL VECES MÁS SIMPLE de aprender que todos aquellos juntos. Han pasado algunos años, y aún sigo sin creerles. Hum bueno, tal vez les hago la concesión a las muchachias de Mutuales, que estaban Más Allá del Bien y del Mal.

- El TEG. Está bien, me lo explicaron UNA vez, la UNICA vez que lo jugué, pero sospecho que si lo jugara nuevamente, me lo deberían volver a explicar, una y otra y ooootra y oooooootra vez… Me quedo con el Ludo.

Por ahora, ésos. Confieso que me da cierta vergüencita exponerlos así. Son como pequeños Talones de Aquiles en mi cráneo. Igual, tampoco es que acá golpea la puerta taaanta gente. Sólo ustedes, los vecinos de siempre. Y con los vecinos de siempre, mejor con la clara.

Y si quieren consolar a esta muchacha, cuentenlé cuales son sus talones chuecos. Y, de paso, si tienen alguna recetita para memorizar los míos, bienvenida sea.



* Uno de los sueños más graciosos y locos que le escuché contarme, y que recuerdo a pesar de los años.

11 comentarios:

unServidor dijo...

Tu honorable padre tendría que subir a YouTube la explicación, cosa qaue el secreto no muera. Quién te dice, a lo mejor lo ve el bisnieto y reproduce la técnica con una efectividad del 100%.

PD: Mi talón de aquiles es que no me entran los colores en inglés.

gabrielaa. dijo...

bueno, a no jugar al truco me resigné hace años: no lo entiendo no lo entiendo no lo entiendo

LALE dijo...

UnSer: Mi padre es a youtube lo que yo al mate, así que estamos medio en la misma. Ah, aprovecho y le digo que en el blog del Profe hay un dibujo suyo del "después"... bah, del "antes"...

Gaa: yo tampoco yo tampoco yo tampoco...!

¿Jugamos unos chinchones?

Pablo Vottero dijo...

Yo a principio de año noté que muchas de las cosas que se supone que el hombre argentino de saber, no las sabia. Me sentí un poco mal debo admitir, asi que en estos 5 meses aprendí a hacerme el nudo de la corbata y ya tengo 4 o 5 asados hechos (con resultados diversos). Antes de fin de año aprendo a manejar y listo (al menos es la idea).

Ah! hay otra cosa que nunca pude: Romper los huevos en el borde de la sarten. Que triste.

LALE dijo...

Moe, por qué triste? A mí, en particular, no me gusta que me rompan los huevos.

Ni al borde de la sartén ni en ningún otro lado, ja!

Y lo de aprender a manejar, suerte! eso de "en los próximos meses listo el pollo" lo vengo diciendo hace cuatro años...! Sad.

rubiaa dijo...

Lale! Parece que ya estas resignadote a algunas cosas, hace parte de la vida (?). Te lo digo por el truco, es imposible, es imposibleeeee! las palancas de cambio, y todo lo que tenga que ver con el auto, todavia no me resigno. Veremos que pasa en un par de años.

unServidor dijo...

Me pregunto con quién me arregló una cita el Profe...
En fin: volvía para preguntar si la rehén del griego está mirando lo que parece...

LALE dijo...

Rub: estoy más o menos en la misma, lo del auto algún día tendré que agarrarlo. Veo que lo del truco es algo común, así que extiendo la misma invitación que a Gaa, y propongo la "Campaña Anti-truco y pre-Chinchón en las reuniones, pero YA!"

UnSer: Ah nu sé, yo lo reconocí a usté y botonié, a la señorita de los anteojos no... Si lo deja más tranquilo (¿?) ésa no soy yo, ni por descripción ni por retrato.

Y sí, está mirando lo que parece.

GER! dijo...

Yo tuve bien claro que mi camino sería el de la impopularidad cuando esgrimí por primera vez la sincera frase: "Leí Rayuela y no me gustó".

Y sí, cuando algo no te gusta, no te gusta.

Yo al truco le doy bastante, pero el poker...ufff. Mis amigos ya se resignaron conmigo.

Chester J. Lampwick dijo...

No hay caso, vivo en una ciudad con mar (LA ciudad con mar) y jamás pero jamás siquiera sospeché como es eso de nadar. Y ya estoy grande como para seguir intentandolo para terminar nadando estilo perrito (dije nadando, lean bien) delante de tres millones de turistas/sánguches de milanesa en heladerita de playa.

Y si a alguno se le ocurre cuestionar semejante contradicción yo me limito a exhibir mi cédula donde dice claramente: "Lugar de nacimiento: Capital Federal, lejos del mar y ni se le ocurra adentrarse en el coso ése de agua de ahí enfrente."

Chester J. Lampwick dijo...

En cuanto a manejar, aprendí hace muy poco y para su tranquilidad puedo asegurarle que es muy fácil. No le haga caso a los que le dicen: "a tu edad ya no aprendés más y si aprendés nunca vas a manejar bien". Es mentira. Además, si aprendieron a manejar taxistas, colectiveros y remiseros, como no va a aprender a manejar uno que es una persona de bien.

En mi caso, fue por pura necesidad: me mandaron a trabajar casi a otra ciudad. Capaz que si me trasladan a una plataforma petrolífera aprendo de una vez por todas a nadar y ya no tendré nada de qué avergonzarme en la próxima reunion de la escuela.



¿Es una sopapa eso que lleva en la cabeza?


Ough!